Un paseo para hacer desde Alquézar llegando al rio Vero, es el camino que baja desde Alquézar hasta el puente de Fuentebaños.
La ruta comienza desde la Plaza del frontón. Bajamos hacia la iglesia de San Miguel, y seguimos bajando hasta una plaza ancha. Al final de esta, hay un panel de madera y un camino que baja, que indica Ruta de las Pasarelas, Asque, etc.
Este camino se suele utilizar de subida para volver de la ruta de las Pasarelas. El recorrido que nosotros hacemos ahora es de bajada (luego será subida). A mitad de la bajada hay un punto donde se bifurca el camino, debemos seguir en dirección Asque, y siempre en bajada, hasta que lleguemos al puente y al rio.
Una vez llegados al puente, y para visitar la fuente, debemos atravesar el puente, y a 50 metros hay un panel que pone «agua no tratada» hacia la derecha. Seguimos en esta dirección, y al lado de unos pequeños agujeros en la piedra con forma circular, vemos un chorro de agua que sale de la roca. Esta es la fuente.
Es una fuente muy curiosa, ya que ademas de manar todo el año, lo hace a una temperatura constante, unos 26ºC.
Desde aquí podemos dirigirnos de nuevo hacia Alquezar o bien hacia Asque, aunque tenemos una fuerte subida de una 1h30.
La Sierra de Guara guarda muchos y buenos caminos. Algunos están bien marcados y señalizados, como la Ruta de las Pasarelas, la ruta Alquézar-Asque-Alquézar, las rutas de pinturas rupestres como Quizans y Chimiachas, Senderos de Rodellar, Vadiello, el camino natural….
Aun así, hay un montón de caminos que no están tan marcados y que nos permiten disfrutar de unos paisajes y unas vistas increibles alejados de las sendas más transitadas.
Uno de ellos es el camino que viene desde Lecina hasta Alquézar. Recientemente, las cuadrillas del Parque de Guara lo han limpiado y señalizado con pequeños carteles de madera y algunos hitos con pintura verde clara/verde oscura.
La ruta comienza en Lecina. Nosotros dejamos el coche en el parking del pueblo y dimos un paseo por el pueblo, viendo la encina milenaria (de ahi el nombre del pueblo), y las antiguas casas señoriales con los escudos en las fachadas.
Detalle de una de las puertas con una artística chapa para el agua.
Ventana con arco conupial y dibujos geométricos.
Para comenzar la ruta pasamos el Parking, y a unos 100 metros sale la primera señal a mano derecha.
Esta nos dirige en bajada hacia la fuente de Lecina, uno de los aportes más importantes del Rio Vero, aquí podremos coger agua. Seguimos pegados al río, pasando por un pequeño puente. No será la última vez que cruzamos el río.
Ahora comienza la subida, por una senda que transcurre por un cortado al lado del rio, y donde podemos comenzar a apreciar la erosión fluvial, Atravesaremos el barranco de Argatín, normalmente seco, pero que puede llevar algo de agua si hay tormentas.
Llegamos al Parking del Portiacha, con un bonito mirador sobre el Río vero. Desde aquí podemos ver el barranco de Basender, el barranco de la Choca, quizás algún buitre…
Desde aqui nos dirigimos hacia las pinturas de Mallata, unos 15 minutos por una pista muy marcada, que nos lleva a un cruce donde los guías de las pinturas rupestres tienen su punto de encuentro. Aqui podremos desviarnos para ver los abrigos y las pinturas (merece la pena aunque solo desde sea desde fuera) o continuar recto (sin señalización, pero muy marcado (al fondo se ve una marca verde clara/oscura sobre una piedra).
Siguiendo por este camino, llegaremos a las ruinas de la iglesia de San Caprasio, donde esta el desvio que tomaremos. Este nos baja hacia un nuevo valle. La roca cambia a conglomerado, aunque asoman tramo de caliza.
Podemos, igual que en Mallata,visitar los abrigos de Arpan y la Cueva del Trucho, sólo desde fuera, pero podemos pensar e imaginarnos la vida del hombre hace 18.000 años en este lugar.
Aquí, enfrente de esta cueva, podemos encontrar una fuente, aunque depende dela temporada puede no tener mucha agua. Un pequeño descanso antes de una buena subida.
Y después de esta bajada, ahora toca una pequeña subida hasta un collado donde pasaremos a otro barranco, el Lumos, ya todo de conglomerado.
Podemos elegir ir hacia abajo, hacia el barranco (aunque si es época de lluvias nos podemos mojar los pies), o seguir hacia la derecha, por la parte superior. Los dos caminos llevan al mismo lugar, al puente de Villacantal, otra de las joyas de este camino.
Antes de llegar al puente habremos pasado por el cruce que sube a Asque.
Desde aquí, nos queda una buena subida hasta Alquézar, 30 minutos cara arriba. Esta es la vista que podemos observar…
Después de 3h30-4horas si no hemos hecho muchas paradas, estaremos en Alquézar.
Podemos descansar y volver por la tarde hacia Lecina por el mismo camino. Os recomendamos el mismo itinerario.
Hay otras formas de llegar a pie, pero serán más largas o más complicadas. Se puede volver por Asque y luego un tramo por la carretera (un poco más larga), también por el Tozal de Asba (larguísimo recorrido), o bien por Pasolen y Peña Bobin (gran aventura).
Podéis ver y descargar el track en wikiloc.
http://es.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=6322146